Los microondas calientan los alimentos a través de ondas electromagnéticas. Estas son emitidas desde un generador, y dirigidas hacia un componente giratorio que las dispersa. Aunque las ondas van rebotando por toda la cavidad, dejan espacios «vacíos» donde no hay calor. Para que el alimento vaya pasando por todas las zonas de calor, se incluye el plato giratorio.
Los insectos no son tontos; se van a las zonas donde no hay calor puesto que no llegan ondas. Podrían estar horas con el microondas encendido sin que les pasara nada.
Más bacinerías
-
Grandes dibujos y esculturas hechas solo de sal
-
XXV Concurso Internacional de Piano «Cidade de Ferrol»
-
¿Por qué nos sentimos tristes tras una relación?
-
El perro más grande del mundo
-
Las bandas sonoras de los videojuegos más famosos de la historia reunidas en versión Metal
-
Cuando Madrid se queda completamente vacío
-
Los atascos de tráfico se pueden evitar con cálculos matemáticos
-
La noria mas grande del mundo
